Muchas veces sentimos acidez en el estómago porque hemos desayunado algo ácido, como un café. Entonces comemos para calmar esa acidez. Si consiguiéramos que nuestra dieta no diera lugar a esa acidez nos ahorraríamos muchas comidas que no están satisfaciendo el hambre sino el malestar estomacal y eso es ahorro de calorías. Al fin y al cabo todas las calorías cuentan. Así pues, considero interesante que después de una comida que puede producir acidez tomemos un alimento que neutralice esa acidez.
Un ejemplo pueden ser dos o tres almendras, un yogourt, una porción de queso, dos o tres dátiles, leche de arroz...
No hay comentarios:
Publicar un comentario